miércoles, 29 de febrero de 2012

WE ARE AUGUSTINES

RISE YE SUNKEN SHIPS (2011)

Unos días de retiro en mi casa del pueblo me han servido para venir con los oídos complacidos por buenos espacios musicales y a consecuencia de ello, con ganas de escribir en las próximas fechas algo sobre los buenos discos que escuché durante la breve pero gozosa estancia en esas nobles tierras aragonesas. No he hecho gran cosa salvo desconectar de la tecnología, pasar buenos ratos con los amigos y sus cada vez más crecidos críos. y disfrutar de largos paseos por los montes que rodean la comarca de Valdejalón, tan aislados del mundanal ruido que a veces apetece estirarse en el campo yermo y presenciar la grandiosidad del despejado cielo dejando que la brisa acaricie tus sueños para abrazarlos con mimo. En fin, ñoñerías de enajenado mental flower power al margen, una de las cosas a las que más tiempo he dedicado este fin de semana largo es, como os insinuaba al comienzo, a escuchar cd's adquiridos recientemente y que tenía un poco en desuso. El hecho de haberme zampado más de siete horas al volante entre ida, vuelta y visitas a pueblos colindantes, ha colaborado a ello de manera fundamental y esto me da pie a un buen puñado de entradas venideras para acabar de un plumazo como mi reciente apatía.

Vamos por partes. De lo primero que seleccioné fue We Are Augustines, que entraron tras recordar una conversación con el bueno de Jovellix en el pasado concierto de Slim Cessna's Auto Club a razón de una de Tokyo Police Club (toma popurrí). El me decía que no le había entusiasmado la actuación de los carpetovetónicos de Colorado porque prefería otros sonidos más accesibles y me ponía de ejemplo a los canadienses, entonces le quise citar a estos muchachos de Brooklyn (New York) como recomendación y no sé muy bien porque el tema quedó en el tintero, así que me apliqué el cuento y fui yo mismo quién dedicó escuchas a este genial 'Rise ye sunken ships'.

Se trata de un trío cuya propuesta se puede enmarcar dentro del indie-rock, pero con una justa mesura a la hora de darle un tamiz pop a sus guitarras. Brillantes melodías, una voz con personalidad y unas canciones que se pegan al paladar como un chicle de fresa ácida, este debut y único trabajo editado hasta la fecha, supuso para un servidor una de las mayores sorpresas del pasado ejercicio, pero no le dediqué todo el tiempo necesario al descubrirlo, por eso renovar mi atención hacía él estos días ha sido espléndido.

Escuchar mientras cae el sol con la ventanilla dos dedos bajada para que entre el aire fresco con olor a asfalto "Chapel song" y recordar como descubrí su bello vídeo en medio de una grata conversación me erizó la piel el viernes por la tarde, me hizo esbozar una sonrisa y mirar esa preciosa estampa para valorar lo que queda por vivir. Es esta la mejor pieza del álbum a mi juicio, una maravilla que va creciendo entre el lamento vocal, con esos aires a The National o Dreamers Of The Guetto, pero con ese teclado y esos vientos que le dan un enfoque ligeramente épico que perfectamente podrían haber creado los geniales Of Monster And Men, pero la cosa solo hace que progresar en las notas de la majestuosa "Augustine", con esa cubierta próxima al emocore, y ese sonido esperanzador dentro de su apacible melancolía, "Headlong into the abyss", que recuerda muchísimo a la honorable banda de Matt Berninger, con la notable diferencia de ese sufrido tono de voz de su cantante, y que a mitad hace un parón sensacional para dar el empujón a un ritmo explosivo cargado de emoción, "Book of James", inmerso en ese punto que The Killers han encontrado a la influencia de Bruce Springsteen, con todo lo peligroso que puede sonar eso, alzándose con una digna victoria que no cae en el cliché de la imitación implícita, "Juarez", en cuanto a lírica la mejor del lote, poseedora de una letra formidable que narra una triste historia llena de nostalgia, con un fondo instrumental muy adecuado, "Philadelphia (the city of brotherly love", perla rockera para demostrar que también saben rugir cuando las circunstancias lo requieren, "Patton state hospital", veloz, sobria, furiosa en su desenlace, más cerca de los Jimmy Eat World que de Bad Religion, no obstante, pero con la misma actitud inconformista, y "Barrel of leaves", dulzura afligida en la onda de los Death Cab For Cutie de 'Plans', una joya que da el estoque necesario para que nos jactemos de haber llegado a ellos.

El nombre del grupo viene del hecho tontorrón de que se formaron en Agosto y ante la duda de que denominación elegir, que mejor que optar por la sencillez. Billy McCarthy, Eric Sanderson y Rob Allen son We Are Augustines.


2 comentarios:

  1. Hola!!

    No tienes que disculparte por el tiempo en contestar! Faltaría más... jeje...

    Pues sí, Sufjan Stevens para mí ha sido una banda sonora constante y es que su música me llena como pocos músicos saben hacer. Otro cantante que me encanta es Rufus Wainwright, no sé si te gusta o no, pero para mí es otro de esos que te atrapan en sus canciones. Si no lo has escuchado ponte "Go or go ahead" a máxima potencia y me dices... La piel de gallina es poco... jejje...

    Por cierto, que yo también soy de zaragoza!! jeje

    Voy a ponerme en spoty "We are augustines", que no los conozco, a ver si me molan! Un saludo!!

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  2. Apreciado paisano...el bueno de Rufus no es santo de mi devoción...quizás tenga que dedicarle más tiempo, porque en teoría me tendría que gustar, pues me parece un artista extraordinario, pero no sé que me pasa pero me cuesta digerirlo son perder la atención a la escucha a mitad de recorrido. Quiero verle en directo en el Primavera Sound si no coincide con nadie que me llegue al alma, porque tal vez en vivo me conquiste. De todos modos, tiene una versión de The Beatles en la banda sonora de 'Yo soy Sam', que me gusta mucho.
    Eso sí! como tengo un ratico de relax ante la imposibilidad de ver un documnetal que me disponía a ver (esos desgraciaos de Megaplay, grrr), voy a poner 'Go or go ahead' a todo trapo ahora mismo a ver que pasa :P

    Por cierto, si has leído mis escritos, verás que soy más de pueblo que San Isidro Labrador, jaja, con lo que te he de decir que soy de un pueblo que imagino que te sonará que se llama Calatorao (al lado de La Almunia De Doña Godina), pero he vivido en Barcelona desde crío.
    Un alegrón que seas de por allí, oye, que somos pocos en la blogosfera, parece ser :D

    Espero que te hayan gustado los We Are Augustines, son distintos a los artistas de los que hemos hablado, pero ya ves que me voy mezclando sonidos. Soy de paladar de esparto, jaja. Hasta hace cuatro días como aquel que dice, ponía enlaces, pero al cerrar Megaupload tuve que quitar todos, pero bueno, ya ves que siempre hay formas de llegar a los discos (bendito spotify).
    Abrazos!

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